Es sabido la crisis mundial que está azotando a los países de la OCDE. A unos más que a otros. En el caso de España, básicamente, el problema no es que quiebre el estado por el paro o alto déficit. El problema es la liquidez que no tiene el Estado español para pagar las deudas. Es solvente pero no tiene liquidez. No tiene dinero en cash. Los bancos, ahora con las cajas fuertes llenas de dinero fresquito, no quieren prestar porque tienen miedo. Los bancos no se prestan dinero unos a otros porque no se fían entre ellos. Cada uno tiene sus “tufos” particulares. Y, por descontado, los bancos tampoco prestan a las pymes o pequeños empresarios.
El dinero que tienen los bancos prefieren invertirlo en deuda pública. Les sale mucho más rentable.
De un modo parecido, a los bancos chinos les está pasando lo mismo.
Los bancos chinos tampoco se fían
Este verano, los mercados se pusieron un poco nerviosos porque los bancos chinos casí llegan al credit crunch. Es decir, se reduce el crédito a las empresas. Los tipos de interés interbancarios, que son los tipos de interés que se ponen los bancos para prestarse entre ellos, empezó a subir. Y empezaron a subir tanto que el gobierno chino tuvo que salir a la palestra.
Los intereses a los que se prestan dinero los bancos chinos entre ellos, subió porque no se fían. No se fían porque no saben cuánto dinero en sus balances van a ser préstamos sin cobrar. Especialmente los altos préstamos a inmobiliarias. Nadie se fia de nadie.
Esto pasa entre los préstamos que se conceden cada banco, pero para los créditos que los bancos prestan a los ciudadanos chinos, se ha encontrado una especie de “huida hacia adelante”.
El sistema bancario chino está entre pañales todavía. Entre la ciudadanía no tienen ese gen de vivir del crédito del banco. Hay millones de chinos que piden dinero prestado al banco pero es que hay más gente que no ha pisado una sucursal bancaria en su vida. Esta gente también necesita préstamos para poder crecer en sus negocios y van a pedir dinero a la misma puerta que han ido toda la vida: sus familiares.
La familia china también como banco chino
La familia china ayuda en todo lo posible al familiar que quiere instalar un nuevo negocio o ampliarlo. Son muy ahorradores y tienen liquidez suficiente para prestar dinero si lo necesita. El tipo de interés no es mayor que el del banco, además puede refinanciarse, cambiar condiciones de pago o de fecha de vencimiento. La rapidez de obtención es mayor, con mayor agilidad de negociación y de recobro.
El préstamo familiar ha sido la favorita entre los chinos por temas de ayuda familiar y porque no había un sistema bancario muy sólido en China.
El peligro de impago del préstamo es menor en pueblos, o ciudades pequeñas en donde casi todos se conocen. El deudor tendrá un alto coste de cara a lo social si deja de pagar su deuda.
Nueva línea de negocio; Los bancos en la sombra
Tanto en periodos de auge como de crisis, siempre hay oportunidades de abrir negocios y ganar dinero. Esto es lo que están haciendo los llamados “prestamistas”. Son hombres que ya no prestan solamente a sus familiares sino a gente menos allegada y desconocida. Si el familiar no te ayuda, si no quieres pedir prestado dinero al banco por no querer declarar o porque simplemente no te concederían el préstamo, entonces ahí están los llamados “bancos en la sombra”.
Parece ser que hay bastante demanda sobre este servicio porque cada vez hay más prestamistas en la sombra. Prestan su dinero a un individuo desconocido por un alto interés. Mucho mayor que el del banco chino. El prestamista calcula el riesgo de impago y pone un tipo de interés de devolución y el prestatario calcula el riesgo de aceptar o no ese tipo de interés acorde a sus posibilidades de devolución.
Total descontrol de los préstamos
Este método de préstamo se ha popularizado en toda China y según algunos estudios del JPMorgan Chase el valor de préstamo de estos bancos en la sombra puede llegar al 70% de la riqueza de todo el país. Según la Academia de Ciencias Sociales de China está cantidad de préstamos es del 40%. La agencia de calificación Ficth calcula que entre préstamos legales e ilegales llega hasta el 200% de la riqueza de China.
Ya no es grave sólo la cantidad sino que no tienen ni idea de cuánto puede ascender esta práctica.
Pero lo que más le preocupa al gobierno chino es qué pasará si China sigue decreciendo al ritmo que lo está haciendo. Los bancos tendrían que hacer frente a sus balances de créditos impagados que finalmente pagaría el Estado chino, pero los prestatarios chinos que pidieron dinero prestado al banco en la sombra no podrán devolverlo.
Millones de pequeños empresarios que pidieron dinero prestado a un tipo de interés muy alto a estos bancos en la sombra, no podrán pagarlo. Perderán sus negocios, sus ahorros, y seguirán siendo acosados por los tipos que les prestaron el dinero. El drama económico, aumentando el desempleo, y social, aumentando la criminalidad de los recobros, en China será enorme.
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Desde Viajarfull says
Diego, justo hoy he encontrado tu blog y me han parecido muy interesantes las cosas que publicas. Si puedes me encantaría leer más información sobre la economía de este país, ahorita estoy revisando otro de tus artículos donde recomiendas algunos libros, se ven bastante interesantes.
Diego Quiñones says
Gracias, hago lo que puedo, jeje.